La plantilla reclama una negociación colectiva efectiva como vía imprescindible para resolver el conflicto

Los trabajadores de Bergé Marítima han iniciado una huelga en los puertos de Avilés y Gijón, que comenzó en el día de ayer, continuando hoy 23 de diciembre y se retomará a partir del 26 de diciembre con carácter indefinido.

La convocatoria responde a una situación sostenida de despidos escalonados, traslados de trabajadores a otras empresas del grupo con pérdida de derechos y aplicación de convenios colectivos inferiores y a una reorganización derivada de la digitalización que, lejos de mejorar el empleo, está sirviendo para reducir plantilla y sobrecargar de tareas a la que permanece, afectando directamente a la calidad del servicio prestado.

Especialmente grave ha sido el último despido producido el pasado 9 de diciembre, ejecutado sin garantías mínimas en el procedimiento.

Asimismo, Coordinadora denuncia una dejadez empresarial en materia de prevención de riesgos laborales, particularmente en lo relativo a la exposición a sustancias y ambientes pulvígenos, la falta de evaluaciones adecuadas, de medidas de protección, de procedimientos de trabajo y de formación básica en coordinación de actividades.

La representación legal de los trabajadores ha intentado evitar el conflicto mediante solicitudes formales e informales de negociación, incluida la vía del Servicio Asturiano de Solución Extrajudicial de Conflictos, sin que la empresa haya comparecido ni mostrado voluntad negociadora.

La plantilla exige poner fin a los despidos y a la pérdida de derechos, garantizar el empleo en los puertos asturianos y revertir el último despido. Pero, por encima de todo, la salida al conflicto pasa necesariamente por el respecto a los mecanismos de una negociación colectiva efectiva, que hasta ahora la empresa ha venido ignorando.